21 DE JULIO DE 1936: las milicias comandadas por Pérez Garmendia redujeron los focos rebeldes guarecidos en el Hotel Reina Cristina, en el Gran Casino y en los Cuarteles de Loyola, en Donostia y sus alrededores. El mismo día, el comandante rebelde, Vidal ocupaba la ciudad de Villarreal, aunque dos días más tarde fuera desalojado por el general Camilo Alfonso Vega.
22 DE JULIO DE 1936: La aviación nazi bombardeaba la población de Otxandiano, matando decenas de mujeres y niños. Prontamente, la guerra comenzaba a mostrar su cara más criminal con cifras demasiado elocuentes: más de cincuenta muertos y casi ochenta heridos se contabilizaron entre la población civil.
23 DE JULIO: Se produjo un atentado en Bizkaia contra dos sacerdotes nacionalistas, motivando las protestas airadas y oficiales de José Antonio Agirre. Durante aquella noche quedó constituida la Comisaría General de Defensa de la República en la provincia de Bizkaia con la participación de todos los Partidos Políticos integrados en el Frente Popular junto a todos los Sindicatos. Esta Comisaría organizaría cinco núcleos de defensa armada bajo la dirección del socialista Paulino Gómez y el capitán Arrambarri. Este comité de Defensa fue reestructurado antes del cercano 15 de agostoo del mismo año. En tanto, Donostia, tras dos días de pausa, se reanudó el ataque republicano contra el Hotel Cristina, logrando la rendición de los golpistas. Finalmente, el levantamiento militar en la provincia de Gipuzkoa bien pudo considerarse un fracaso en primera instancia, debido a las indecisiones y rendición del coronel fascista, león Carrasco.
24 DE JULIO DE 1936: Para mejor comprender el protagonismo que le cabía al traidor Mola en la sublevación militar y el gris papel que jugaría el criminal Franco (de no mediar el nunca aclarado accidente aéreo donde aquél perdiera la vida). Recordemos que el alzado en armas ordenó a la Diputación que le habilitara un crédito extraordinario y por única vez, de dos millones de pesetas "para hacer frente a los gastos de guerra demandados para salvar a España" (sic). 24 horas más tarde, la Caja de Ahorros de Navarra lo concedía.
24 DE JULIO DE 1936: Fue creada la Junta de Defensa Nacional de Burgos.
24 DE JULIO DE 1936: El general Mola ordenaba al coronel Carrasco, a cargo de los Cuarteles de Gipuzkoa, rebelarse a las autoridades republicanas. Carrasco, al mismo tiempo mantenía nerviosas conversaciones con el coronel Bengoa, jefe de la Guardia Civil de Gipuzkoa, pero como éste ya había declarado su decisión de respaldar a la República, su indecisión se acrecentó. tras superar varias crisis de nervios, Carrasco se declaró fiel a los dictados republicanos, incluso, puso armas y hombres a disposición del gobierno civil.
25 DE JULIO DE 1936: La conspiración adquiría carácter internacional al llegar armas de los regímenes fascistas de Hitler y Mussolini, mientras que Europa, fiel a su esencia que mostraría durante el curso de la guerra, miraba hacia otro lado y se convertía en cómplice por omisión o innacción.
26 DE JULIO DE 1936: la Caja de Ahorro de Navarra concedía un subsidio diario de siete pesetas para las familias carecientes de recursos, cuyos varones estuviesen participando en el bando golpista del conflicto bélico.
27 DE JULIO DE 1936: El golpista Emilio Mola recibió en Pamplona al coronel aliado Ortíz de Zárate y al falangista donostiarra Balmaseda y dio órdenes para que el jefe de los requeté gipuzkotarras, Bustindui, comenzara a concentrar a concentrar voluntarios civiles en las Iglesias del Buen Pastor y Carmelitas. Esta acción dejaba a las claras sobre la connivencia militar y buena parte de la iglesia católica, una vez más.
27 DE JULIO DE 1936: los dirigentes nacionalistas, Landaburu y Agirre fueron detenidos y amenazados de muerte en caso de no firmar el manifiesto de adhesión al golpe militar. Ante la presión ejercida, incluso con la amenaza de fusilamiento a la madre del primero, lo hicieron obligados por las circunstancias, aunque el texto sería modificado.
28 DE JULIO DE 1936: Quedaban expuestas las primeras grandes diferencias entre los políticos vascos, teniendo en cuenta la falta de visión única para enfrentar el conflicto: mientras que en Donostia se concretaba una Junta de Defensa integrada por representantes de todos los Partidos, en Azpietía nacía otra Junta con impronta nacionalista presidida por don Manuel de Irujo, al tiempo que en Eibar se constituía la tercera Junta de corte socialista. Era imposible aceptar tamañas divisiones a tan sólo siete días del alzamiento militar fascista, pero así se daban los acontecimientos y del "banquete" se servían los golpistas.
29 DE JULIO DE 1936: Tras ser nombrado Delegado Nacional de Requetés, Zamanillo se encargó de llevar a la práctica "El Compendio de Ordenanzas, Reglamentos y Obligaciones del Boina Roja". Dos semanas después de provocado el golpe de Estado se publicaron las cifras oficiales que hablaban de un total de 5 500 voluntarios en Navarra.
1700 voluntarios en la Merindad de Sangüesa
1300 voluntarios en la Merindad de Pamplona
550 voluntarios en la Capital
1250 voluntarios en Lizarra
820 voluntarios en Tudella y Tafalla
A tan sólo diez días del golpe militar, ya resultaba inaceptable la hipótesis de un alzamiento sorpresivo. Entre la desidia de los gobiernos regionales, las propias divisiones internas del gobierno republicano y las fuerzas militares aliadas a la democracia, dilatando decisiones contundentes, rápidamente se cocinaba la victoria fascista.
Todos los materiales histórico-culturales a través de los cuales el Instituto de Cultura Vasca Eneko Aritza basa su actividades se editan en formato cd.