(*)-LA CASA XIMENA:

Los textos más antiguos que hacen referencia a esta Casa datan desde el año 781, cuyo primer monarca confirmado fue Ximeno "El Fuerte", al que le siguió su hijo, Iñigo Ximénez, quien al mismo tiempo fue contemporáneo del propio Eneko. Recordamos que en las documentaciones medievales recogidas firmaba como rey e hijo de Ximeno "El Fuerte". Sin dudas, la Casa Ximena, rama política de la Casa Aritza, dominaba por completo el pequeño Estado navarro y de hecho, todas las investigaciones realizadas al respecto, indican que el epicentro de las actividades comerciales y políticas se encontraba en la región que ocupa la actual localidad de Lizarra. Esta Casa se uniría a la Confederación General a partir del año 824, cuando el propio Eneko fuera ungido monarca.

(*)-LA CASA TUDELA:

Esta Casa tuvo su origen en una familia muladí que ejercía sus dominios en el valle medio del Ebro, entre los siglos VIII y X, cuyo primer referente fue el conde hispano-godo, llamado Casio. Cuando se produjeron las invasiones musulmanas a principios del siglo VIII, el propio Casio se convirtió al Islám y comenzó a vasallar para el Imperio Omeya, en el año 713 a cambio de conservar el pder en las regiones mencionadas.

La acepción Banu Qasi significa "hijos de Casio" y sus descendientes, al paso de las décadas gobernaron las regiones de Arnedo, Tudela y Zaragoza. Recordemos que los Banu Qasi se convirtieron en parientes políticos de los Aritza cuando el Emir de Tudela, Muza Fortún se casara en cuartas nupcias con la madre de Eneko, en el año 784. Muza ben Muza, hijo de Muza Fortún y la madre de Eneko, fue su medio hermano con el sellara una alianza sanguínea/política inquebrantable al paso de los años. Vale acotar que en el principio del reinado de Eneko participaron contra los condes Eblo y Aznar, enviados en el año 824 por el Emperador franco, Ludovico Pío para someterlos.

Los lazos confederativos con Iruña (Pamplona) databan desde antes del año 778 cuando estallara la Primera Batalla de Orreaga. Como ya dijimos, esta región sureña de Navarra estaba gobernada por la familia musulmana, Banu Qasi, desde el río Gállego hasta las inmediaciones de Zaragoza y por el norte, hasta Tudela. Se trataba del mismo territorio que el conde franco, Leogivildo arrebatara a los pueblos baskongados y que los musulmanes recuperaran cuando se asentaran allí. Convengamos que en algunos textos históricos algunos textos históricos, ciertos investigadores la han denominado VIEJA BASKONIA GÓTICA.

Nuevamente, recordamos que el doble matrimonio de su madre y su hija Assona con ciertos miembros de la poderosa familia árabe, ligaron políticamente los intereses del Emirato con las libertades políticas y sociales que perseguían los baskones. Bajo tal manto protector, El monarca Eneko lograría consolidar su reino hasta convertirlo en una Nación-Estado que creía a pasos agigantados, aunque, justo es reconocerlo, sin tamaño padrinazgo militar no hubiese sido posible. De manera que la estrecha alianza establecida entre los Banu Qasi y la Casa Aritza perduró hasta el derrumbe de la última dinastía Ximena en el año 905, cuando fuera ungido nuevo monarca navarro, Santxo "Abarka".

(*)-EL CONDADO DE ARAGÓN:

Se trató de un Condado nacido a principios del siglo IX, dentro de uan franja montañosa correspondiente a los Pirineos Centrales que incluía los valles de Ansó, hecho y Aragón. La creación de este Condado obedecía a una prioridad establecida por la dinastía carolingia para proteger su frontera meridional de los posibles ataques musulmanes. Aunque, en un principio estuvo bajo la tutela  de los reyes francos, en la medida que se extendió por la cuenca alta del río Gállego comenzó a acercarse al núcleo de poder de los caudillos pamploneses. 

Si es cierto que tras la muerte del conde Aureolo, en el año 809, se produjo un vacío de poder que aprovecharon los musulmanes para recobrar plazas fuertes. Karlomagno, tiempo después, impuso en Aragón al caudillo Aznar Galindez I, autitulado "Conde de Aragón" e iniciador de la dinastía Galindo en la primera mitad del siglo IX. Sin embargo, su gobierno no tuvo continuidad, porque el yerno de Eneko Aritza, Garsea "El Malo" (hijo de Galindo Belaskotones) lo derrocó ante el afán expansionista de Aznar Galíndez I.

Este Condado limitaba  con la región de Jaca y casi siempre formó parte del reino baskongado. En líneas generales, mantuvo buenas relaciones con los baskones pamploneses y aprovechando la retirada del Partido Franco de Pamplona, pudo fortalecer su soberanía hasta convertirse en soporte verdadero del reino, cuando Azenari II se casara con la nieta del rey Eneko.